Keke de Manzana (Receta de Mamá)

Llevo mucho deseando hacer esta receta pero año tras año he ido postergándola por diversos motivos. Es que, es una receta de mi mami y siempre he pensado que la mejor oportunidad de hacerla es en el día de la madre ya que es una "invención" suya, así que, este año por fin se me hizo y la preparé como antesala del día de la madre y de paso para compartirla con uds. por si buscan ideas para preparar ese día que acá en Lima celebramos cada segundo domingo de mayo.

Antes de pasar a la receta quería contarles un poco de la historia de este keke. Era el año 89, mas o menos y vivíamos en Chaclayo, un precioso pueblo en la sierra de Lima, cuyo clima seco era ideal para mis problemas respiratorios. Vivimos ahí como 4 años y tengo que decir que fueron unos de los mejores años de mi vida. Aparte que mi salud mejoró mucho, alquilamos una casa grandota que tenía un jardín inmenso y de vez en cuando recibíamos a mi tíos y mis primos que traían a su perrita Cimarrona que a las finales se terminó quedando con nosotros.

Mi hermano Joel (de 3 años), yo (de 7) rodeados de mis primos Juan (arriba), Gary (sin polo) y Omar.

Mi mamá en ese entonces tenía mucho tiempo libre pues en esos años ella dejó de trabajar para cuidar de mi hermano y de mí. Fué así que, aunque nunca le gustó cocinar, en Chaclacayo tuvo que meterse de lleno en la cocina para felicidad nuestra. De sus platos salados no recuerdo mucho pero de sus postres, si que sí. No es que se haya vuelto una experta en postres pero, los pocos que hacía eran sensacionales. Recuerdo sus mazamorras, especialmente la de calabaza, también sus cachanguitas (umm tengo que hacerlas para el blog!) y su ponche de huevo que lo hacía hasta que se enteró que los huevos crudos pueden tener salmonela y ni más.

Y el postre que para mí era la estrella, el keke de manzana. Es que cada vez que lo hacía era como una fiesta. Toda la casa se llenaba del olorcito de la vainilla y manzana desde antes que salga del horno lo que hacía que esperaramos con ansías que el queque salga ya del horno. Incluso a veces no podíamos esperar más y le metiamos diente ni bien salía del horno y el keke aún estaba humeante, cosa que mi mamá nos decía no hacer sino nos hinchaba la panza.

♥♥♥♥

Espero que les haya gustado la historia de este kekito de manzana, ya no los torturo más con tanto bla, bla, y aquí les dejo la receta que es tal cual mi mamá nos lo hacía hace más de 20 años (excepto por la adición de miel que usé para que la superficie saliera más doradita).

Ingredientes:

180 g. harina sin preparar
2 cucharaditas polvo de hornear
1/2 cucharadita pimienta dulce molida (all spice)
Una pizca de sal
160 g. mantequilla ablandada
170 g. azúcar rubia
4 huevos
1 cucharadita esencia de vainilla
8 cucharada leche fresca
1 manzana delicia
miel cantidad necesaria

Preparación:

Cernir en un bol la harina, el polvo de hornear, la pimienta dulce y la sal. Reservar.

Aparte, batir la mantequilla y el azúcar con batidora de mano hasta que adquiera consistencia de crema.

Agregar los huevos uno a uno y batir después de cada adición.

Añadir, también, la vainilla.

Por último, agregar los ingredientes secos (harina, polvo de hornear, pimienta dulce, y sal) intercaladamente con la leche y mezclar hasta que la masa esté uniforme.

Verter al molde engrasado y enharinado. Aplanar la superficie con una espátula.

Cortar las manzanas en rodajas sin pelarlas y acomodarlas sobre la masa como se ve en la foto.

Pincelar las rodajas de manzana con miel caliente para que corra mejor.

Llevar a horno precalentado a 180° C. por aprox. 1 hora.

PD. Si ven tanto color rojo en las fotos es porque es el color favorito de mi mami y como ven siempre lo lleva puesto y como este receta está dedicada a ella por su día pues todo tenía que ser rojo.